martes, 19 de enero de 2010

A77AQUE-ESTALLAR


"Nada es inalterable, nada es definitivo, sólo el cambio es lo único que permanece en el tiempo" cantaba Ciro Pertusi en Un día perfecto (1997), el mejor disco de la historia de Attaque 77. El cambio fundamental que se produjo antes de la edición de Estallar fue, precisamente, la partida del histórico frontman del grupo.Porque, mirado con atención, el nuevo álbum de los doble siete no presenta mayores variables que la ausencia de Ciro. Si bien no se trata de un hecho menor, las 15 composiciones nuevas no son tan diferentes de las que presentara la banda en los años inmediatamente anteriores.
La gran cuenta pendiente de Attaque durante la década pasada fue su patente dificultad para construir un álbum meritorio en el cual el repertorio se nutriera de algo más que un puñado de buenos temas, algunos aceptables y muchos otros del montón. Luego de Radio insomnio (2000), su discografía osciló entre recopilatorios de rarezas, registros en vivo y discos de bajo vuelo.
Estallar no logra romper con esa lógica precedente. Al igual que en sus obras previas, la melodía pierde peso específico y la potencia gana espacio con un perfil de guitarras sucias, riffs vieja escuela e intros punk-rock. Incluso, en primera instancia, parece que prácticamente todas las canciones podrían haber estado cantadas por Pertusi. Aunque Mariano Martinez fue ganando protagonismo en los últimos trabajos (la producción corre otra vez por su cuenta), su performance en el rol de cantante central resulta bastante chata porque cuenta con menores recursos vocales que su antecesor.
Los tópicos desarrollados por las letras tampoco resultan muy novedosos: Memoria es hermana menor de Canción inútil, Anormal es heredera de Fiebre de sábado, Dales poder va en sintonía con Buenos Aires en llamas y Desamor recuerda a Arrancacorazones. Demasiados parentescos y filiaciones quedan expuestas sin hurgar de manera profunda.
De todos modos, algunos pasajes están bastante logrados. La mencionada Desamor es firme candidata a hit de los próximos tiempos; Apesta suma puntos con riff de cabalgata con estribillo intenso y referencias al que se vayan todos; Cruces y Que nos sucedió aportan algunos elementos nuevos; Disfraz y la canción que da nombre a la placa (dedicada al ex compañero) no están mal. Sin embargo, el promedio sigue bajo: seis canciones de quince no alcanzan para construir un buen disco y la calificación alcanzada apenas roza el aceptable. Más allá de las continuidades señaladas, el elemento persistente es la incapacidad para grabar un disco consistente, orgánico, parejo.
En defensa del grupo se pueden aducir dos importantes atenuantes: 1) Incluso con Ciro entre sus filas, la producción de Attaque no atraviesa un pico creativo desde 2000 a la fecha. 2) Para cualquier seguidor más o menos enterado de la última etapa de la banda es muy difícil aprobar de entrada un disco en el que no participa su frontman habitual.
En suma, Estallar será recordado por ser el primer disco sin la participación de su cara visible durante más de veinte años pero que poco aporta a la identidad de un grupo que supo exponer dosis ajustadas de rabia y ternura, de intimidad y conciencia social, de potencia sonora y claves melódicas. El tiempo pasa, los cambios ocurren y la mejoría creativa no aparece aunque cambien figuras claves de la estructura medular de Attaque.


Hits: Desamor, ¿Que nos sucedió?
la frase: "apesta el olor de tanta traición, el grito de ayer se guardó bajo el colchón" (Apesta).
tapa: bastante alegórica.

2 comentarios:

Ezequiel dijo...

No escuché el disco, así que no me animaría a opinar. En realidad, tampoco me interesa mucho escucharlo... hace rato que no escucho entero un álbum de Attaque. Lo que sí puedo decir -y a favor- es que los ví sin Ciro y el show estuvo muy bueno, excelente el repertorio elegido y muy buena la interpretación de Mariano, algo no tan fácil de lograr, sabiendo que nunca fue frontman.

Facundo Miño dijo...

Tarde pero llega mi respuesta. Yo, en cambio, escuché todos sus discos completos. Es una de las pocas bandas que mantengo desde mi adolescencia temprana. No los vi en vivo como trío y espero sacarme la duda en breve sobre el nuevo formato. Para mi,más allá del cambio importantísimo que ocurrió, la parte creativa de la banda viene en retroceso. Con Ciro en la banda ya era palpable. ¿Resultado? El problema compositivo no era exclusividad de Ciro ni del resto. Es algo más profundo y complejo que cada una de las individualidades. Mariano como cantante no me cierra por ningún lado, creo que las únicas canciones que verdaderamente me gustan de él son Volver a empezar y Luz más su versión de Soy rebelde.