AIRE (RE)ACONDICIONADO

La reaparición de Al Abordaje (lunes a viernes de 18 a 21 horas por 97.5 Fm Más Rock) es un verdadero acontecimiento en el panorama pobre que ofrecen las radios de la ciudad de Córdoba. Cuando la tendencia predominante es apuntar a los ciclos multitarget de corte generalista, híbridos que intentan incluir todos los segmentos posibles aunque casi nunca obtengan fidelidad de parte de sus potenciales oyentes; el programa conducido por Marcelo Gómez se empecina en nadar en contra de la corriente.
Su pasado mitológico en el aire cordobés le permite exponer su chapa, imponer respeto, renovar expectativas, albergar esperanzas. Para quienes preferimos los programas segmentados y valoramos la información específica, nos interesamos por las novedades discográficas más allá del hit de turno y los temas en alta rotación, Al Abordaje ofrece una alternativa atractiva.
Bastó una emisión debut para que quien escribe estas líneas vuelva a sentir la necesidad de escuchar radio como actividad principal, deje en segundo plano la computadora y la lectura. La última etapa en la que seguí con cierta regularidad sus envíos data de no menos de una década atrás. Luego, una sucesión de obstáculos me alejó de su sintonía. Horas atrás, el arranque con su clásico editorial y la inconfundible voz de Gómez al frente de su quijotesco y empecinado ciclo de "rock, metal y blues", tan fuera de órbita respecto del modelo actual, me generó una sensación de frescura inexplicable.
La actualidad de Lynyrd Skynyrd o las entradas para ver a un ex King Crimson como Tony Levin con su banda (algunos de los tópicos que se desarrollaron durante el programa) no ingresan en mi particular universo de gustos musicales. De todos modos, el retorno merece ser festejado por el mero hecho en sí mismo: la vigencia de un espacio que no se deja arrollar por las modas efímeras y circundantes ni cae en la tentación de avalar el supuesto mandato popular ("lo que la gente quiere"). Nada más y nada menos.