lunes, 7 de julio de 2008

SOY SU FAN




Por razones difíciles de explicar todavía no culminé la lectura de Un chino en bicicleta, la delirante novela de Ariel Magnus sobre un pibe que es secuestrado por Fosforito (el hombre de nacionalidad china que fue acusado de quemar una decena de mueblerías en la provincia de Buenos Aires y bautizado de manera tan gráfica por Crónica TV).
De cualquier manera, tres cuartas partes del libro (ganador del premio La otra orilla de la editorial Norma) alcanzaron para tirarme a la pileta y regalarlo o recomendarlo entre mis amigos y conocidos. Hasta el momento nadie vino a quejarse por mi sugerencia. Por el contrario, en algún momento reconocieron la sorpresa que viene causando y comenzaron a relatar algunas escenas memorables que en esa obra abundan. La reseña definitiva vendrá cuando haya finalizado con los pocos capítulos que me restan.
Pero resulta que apenas empecé a hojear Uno a Uno, la antología de cuentos sobre los años 90 a cargo de jóvenes autores argentinos, me encontré con un divertidísimo cuento de Magnus. En una inversión de roles, un hijo obliga a su padre desocupado a realizar diferentes tareas que tienen que ver con su reeducación más allá de los pataleos y protestas del padre (que por momentos parece un niño). Lo leí y estoy cerca de convertirme en fan de su obra.

Bonus track: en el muy recomendable Hablando del asunto publicaron un especial con minientrevistas a todos los autores antologados en Uno a Uno y pueden leer las explicaciones de Magnus sobre el cuento escrito. Además, en el mismo sitio, lo pueden descargar (en forma gratuita y legal).

No hay comentarios: