viernes, 27 de abril de 2007

LA VELA PUERCA-EL IMPULSO


"Le asustan los ruidos y también la tranquilidad, le gustan los mimos pero respira en soledad" arranca Frágil, primer track y corte de difusión. "O te rebelás o te consumís, cerrando los ojos no sirve aplaudir, la hora del miedo parece llegar y aquí no vale pensar" repite el estribillo de la segunda canción denominada El señor. Un clima sombrío e introspectivo recorre transversalmente los 13 tracks (muy parejos entre sí, ningún tema asoma como simple relleno) que incluye El impulso.
El cuarto disco de la Vela Puerca profundiza el camino iniciado en A contraluz y se aleja definitivamente del ambiente festivo que predominaba en sus dos primeras producciones. Y lo hace del mejor modo posible, sin apelar a la fórmula facilista de repetir lo entregado anteriormente. Teniendo en el bolsillo la llave del éxito, prefiere ampliar su búsqueda hacia territorios nuevos, apenas sugeridos en su obra previa.
Sensaciones, angustias, miedos, ilusiones rotas y errores cometidos constituyen el eje temático de las letras pero desarrolladas de manera reflexiva, asumiendo responsabilidad y autoría en lo que sucede, no como simples observadores externos. El ambiente oscuro de las letras es acompañado por ritmos densos, canciones con estructuras complejas y estribillos intrincados. Nada de algarabía y sólo pequeños resabios de su música contagiosa de antaño (Me pierdo, Colabore y Sanar apenas se acercan musicalmente a lo que nos tenían acostumbrados).
Si antes había contraluz, ahora ni un rayo de sol quiere aparecer. Incluso por allí se escucha "donde se habrá ido su sol" (La sin razón) que sirve de muestra de estas historias de rumbos perdidos, lamentos y escasas esperanzas.
Sobre el final, un poco de redención y atisbos de luz en la bellísima Hoy tranquilo que festeja "hoy la vida tiene más valor y pensás no quitarla" para más adelante continuar "respirando profundo poder resistir a que el arma de turno no quiera salir". Sí, esa es la parte más luminosa.
Siguen siendo la Vela, reconocibles casi desde el primer acorde y las líricas son cada vez más personales. Se cerró una etapa y van hacia otra dirección. ¿Algún reproche? Ninguno. Aplaudamos la valentía y el riesgo artístico decidido y festejemos que la esencia sigue allí, intacta.


Hits: Neutro (pasta de clásico, si falla me hago monje tibetano), Frágil y Para no verme más, entre otros.
la frase: muchas muy buenas pero sobresale esta estrofa "el bucanero que existía en tu mente se ahogó, perdiendo su galeón y aquella chispa que encendía tu sol se extinguió, se te apagó el telón" (Neutro, brillante manera de metaforizar la resignación de sueños por mandatos familiares)
tapa: Correcta e ilustrativa, complementa adecuadamente el título del CD.

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